¿Cómo surge el egocentrismo?
por
RADHA BURNIER
¿Cómo surge el
egocentrismo?
La tan usada
palabra ‘mío’ hace referencia a un centro ficticio hacia el cual la mente atrae
todo tipo de experiencia. En realidad no existe. En sánscrito hay una palabra ahamkâra:
aham significa ‘yo’, y kâra ‘hacer’. Por lo tanto ahamkâra es la parte de la
mente que ‘construye el yo’. El ‘yo’ está siendo creado constantemente
por el proceso de etiquetar. Hay una experiencia, y si la mente no dijera
consciente o inconsciente “es mi experiencia”, la experiencia desaparecería.
Debido a que
existe la memoria, se repite; y debido a que tuvo ciertas experiencias crea más
categorías. Experimentó el placer, por lo tanto dice “Yo soy el que disfruta”.
Ha organizado ciertas cosas, por lo tanto dice “Yo soy el que organiza”. Así
habitualmente se apropia de varias cosas y las etiqueta creando entonces el
‘Yo’.
El silencio
no se puede lograr por medio de otra forma de ambición. No pueden decir,
“Quiero que mi mente esté en silencio. Voy a terminar con las fluctuaciones de
mi mente”, esa sería una forma más de logro. Siempre que exista el deseo de
logro o adquisición, existe esta entidad llamada el ‘yo’, la ficción
psicológica que quiere lograr. Por medio de un largo proceso hemos creado la
noción de que existe esta entidad que debe llegar a algún lado, y continuamos
apoyando esa idea. Es difícil imaginar una vida en la que ese ‘yo’ no está
llegando a algún lugar o adquiriendo algo.
Entonces no
podemos lograr el silencio diciendo “yo quiero estar en silencio”, por la
simple razón de que el ‘yo’ no tiene la capacidad del silencio. Es la única
fuente de todo ruido, perturbación y problemas. Pensamos que los problemas
llegan desde afuera, pero aunque puede que haya dificultades afuera de
nosotros, el problema yace en el interior. La dificultad puede ser que el
cuerpo tiene alguna enfermedad. Si está enfermo, lo tratas. Pero la dificultad
puede transformarse en un problema. “Yo estoy enfermo. He tenido una vida
buena, entonces, ¿por qué debo sufrir? Cuando estoy enfermo las personas no me
dan el tipo de atención que necesito.” Podemos crear innumerables problemas a
partir de esa enfermedad. Pero deberíamos ver que no es una dificultad sino un
hecho, un hecho difícil tal vez, pero que se puede manejar, eso es todo.
Es
el yo quien crea los problemas. Y el yo nunca puede producir silencio porque
está constantemente creando perturbaciones. ¡La perturbación es el yo! Los
celos son parte del yo, también lo es el apego, y la intolerancia. El yo está
construido de todas estas cosas. Desde ese punto de vista, una frase como ‘la
realización del yo’ es engañosa, si existe la realización de la Verdad no puede
estar el yo en ella. De modo que donde hay logro o adquisición, allí está el
yo, ya sea que estemos conscientes o no. En cuyo caso la mente no está vacía,
está llena de yo.
La iluminación procede del
interior
Uno de los
Mahatmas nos recuerda que la iluminación debe venir del interior. El medio
hacia la iluminación no es sólo la meditación, él habla de la pureza en
pensamiento, palabra y acto. Debe haber pureza, control de las pasiones
animales, y carencia de egoísmo en la intención. Sin éstos, la meditación no es
seria, se vuelve lo que Krishnamurti llamó una actividad de aislamiento.
Cuando
hablamos de la mente, ¿incluye lo consciente y lo inconsciente? ¿Cuál es la
diferencia entre los dos?
La mente es
por supuesto lo consciente y también lo inconsciente o subconsciente. Existen
varias cosas en la mente que no se notan en determinado momento. Eso no
significa que no pertenezcan a la mente. En la mente subconsciente puede haber
avaricia, por ejemplo, pero puede estar latente porque la oportunidad para
manifestarse no se da en ese momento. Cuando se manifiesta se vuelve parte de
la mente consciente. De igual modo, dentro de la mente hay muchas tendencias
que llevamos de encarnación en encarnación y llegan a la mente consciente según
las circunstancias y la oportunidad. Lo mismo ocurre con la memoria. Existen
muchos recuerdos de los que la persona no es consciente. Algunas veces se
pueden recordar con bastante facilidad, y otras veces sólo en ocasiones
especiales.
Ciertas
preguntas fundamentales siempre se tendrán que examinar con cuidado. La que nos
interesa principalmente en este momento es: “¿Cuál es la naturaleza del yo?”
Hemos visto que esto requiere mucha reflexión y podemos lograrlo sólo por el
uso sostenido de energía.
Hemos llegado
a ciertas conclusiones. El yo parece ser yo mismo, el ‘yo’. Este ‘yo’ está
formado de impresiones creadas principalmente por el cuerpo porque tenemos
cierta imagen de nosotros que está parcialmente conectada con la persona
física. Llegamos a comprender que esta persona física tiene poco que ver con el
yo real. La confusión entre esto y el Yo es la causa de muchos problemas y
éstos se complican más con la identificación con las emociones y los
pensamientos.
Nada de esto
se puede comprender en profundidad por medio de un proceso de simple
razonamiento, sino solamente por medio de lo que se ha llamado ‘clara visión’.
Pero debido a que la ilusión del yo como auto-existente, como que tiene una
identidad individual separada, se ha aceptado como una realidad durante muchos
años, ciertamente durante muchas encarnaciones, ha asumido la apariencia de
realidad. Estamos condicionados por todo a nuestro alrededor y tomamos su
existencia como natural. Cuando niños se nos enseñó a fomentar nuestros
intereses, a pensar en todas las cosas en relación con esto. Todo esto no puede
evitar que ejerza su influencia. Entonces es fácil aceptar la creencia de la
existencia del yo, y debemos observar muy cuidadosa e internamente para
descubrir la verdad, para descubrir si después de todo es sólo una imposición,
una ficción creada por el pensamiento.
Sería simplemente
fácil decir: “Sí, el yo no es real”, o “El sentido de separación es una
ilusión”. Pero eso sería sólo proferir palabras. Si realmente viéramos el
hecho, cambiaría nuestra vida.
La meditación
es el trabajo que hay que hacer para ver. No es sólo una actividad cerebral, es
explorar profundamente para descubrir la verdad con respecto a la naturaleza de
ese yo que nos ha estado manejando por innumerables encarnaciones.
Auto-existencia
La idea de la auto-existencia (existencia-en-sí-misma) está asociada con la existencia de todo lo que conocemos. Debido a que vemos todo separado físicamente, creemos que todo existe en sí mismo y por sí mismo. Y cuando pensamos en términos de conexión, es superficial. De modo que las relaciones se pueden establecer y romper porque la relación, según nuestras ideas, es en sí algo que yace sólo en la superficie de la vida, cuyo logro o ruptura depende sólo de nuestra voluntad. Pero nosotros cuestionamos la afirmación de que ésta sea la realidad, es decir que son objetos separados, desconectados unos de otros. Nos preguntamos si en realidad la existencia, que es el yo de todas las cosas, tiene una naturaleza totalmente diferente.
Auto-existencia
La idea de la auto-existencia (existencia-en-sí-misma) está asociada con la existencia de todo lo que conocemos. Debido a que vemos todo separado físicamente, creemos que todo existe en sí mismo y por sí mismo. Y cuando pensamos en términos de conexión, es superficial. De modo que las relaciones se pueden establecer y romper porque la relación, según nuestras ideas, es en sí algo que yace sólo en la superficie de la vida, cuyo logro o ruptura depende sólo de nuestra voluntad. Pero nosotros cuestionamos la afirmación de que ésta sea la realidad, es decir que son objetos separados, desconectados unos de otros. Nos preguntamos si en realidad la existencia, que es el yo de todas las cosas, tiene una naturaleza totalmente diferente.
Desde un
punto de vista intelectual se pueden dar muchas respuestas, y podemos citar autoridades
en el tema. Pero todo esto no tiene nada que ver con comprender la Verdad con
la que estamos particularmente interesados. “Por sus frutos los conoceréis.” La
inutilidad de los ejercicios puramente mentales e intelectuales se pueden ver
por sus frutos, o por la ausencia de ellos, porque habiéndolos practicado al
máximo nos encontramos en exactamente la misma situación, asediados por las
mismas perturbaciones, por los mismos problemas en las relaciones, por la misma
falta de comprensión. Descubrimos que el intelecto no tiene respuestas.
Pero luego
descubrimos que existe un tipo diferente de conocimiento que llega por una
comprensión más profunda y vemos que da su fruto. Un cambio profundo puede
ahora ocurrir porque miramos el problema desde un punto de vista diferente.
Dirigir la
energía de la mente a la investigación del yo o a examinar la naturaleza de la
existencia, significa también explorar su significado y propósito. A menos que
haya claridad sobre la cuestión de la auto-existencia, la existencia
independiente no relacionada entre sí de cada cosa, no seremos capaces de
comprender esto.
Si la mente
no ve la naturaleza del Yo, si es incapaz de aprovechar la relación que existe
en lo profundo a un nivel sutil, no podrá ver la vida en todo su significado y
belleza.
Podemos ver la relación entre las cosas separadas, entre objetos que permanecen separados pero que todavía existen en algún tipo de relación. También puede haber una percepción en la que la relación no es simplemente la unión de cosas separadas. La unidad es mucho más que esto. Pero sólo puede ser descubierto por una mente que es capaz de ahondar más.
Podemos ver la relación entre las cosas separadas, entre objetos que permanecen separados pero que todavía existen en algún tipo de relación. También puede haber una percepción en la que la relación no es simplemente la unión de cosas separadas. La unidad es mucho más que esto. Pero sólo puede ser descubierto por una mente que es capaz de ahondar más.
Los árboles, una necesidad
Un artículo
provechoso relacionado con los árboles se publicó recientemente en el Guardian Weekly.
Se refiere a los árboles que actualmente están pasando un mal momento, que
constantemente están bajo amenaza. En buena medida los árboles son el hogar de
la biodiversidad del mundo, pero están siendo destruidos sin misericordia. Han
cortado la mitad de los árboles en bosques o selvas, y cada año las áreas
forestadas se ven diezmadas. Esto reduce la cantidad de aire puro que nosotros,
los humanos, respiramos. Además de esto, está la belleza de los árboles.
Un gran árbol
como el Banyano puede ser una maravillosa ayuda por muchos motivos. Pero
especies más pequeñas también son invalorables. No podemos sobrevivir sin
ellas, y se requiere una comprensión profunda para percibir este hecho. Muchos
árboles viven mucho tiempo y otros producen retoños, de modo que cuando hay un
árbol, puede haber muchos más. La atmósfera misma que respiramos se transforma
cuando existe un árbol porque absorben el contenido de carbono y otros
contaminantes. Cuánto más viejos son, más controlan los contaminantes. Además, donde
existen árboles, la temperatura es menor si el clima es cálido.
Desafortunadamente, un problema mayor que la cantidad de árboles que se
han cortado y los bosques y selvas que han desaparecido, es la grave condición
del clima. La Organización de las Naciones Unidas que colabora con entidades
que ayudan a reducir emisiones de carbono, dice lo siguiente: plantar árboles
puede compensar en gran medida las emisiones en la primera mitad del siglo. Por
lo tanto, existe una necesidad urgente de salvar los árboles incluso en las
ciudades. El economista indo, P. Sukhdev, es también un líder en el estudio de
la biodiversidad, y de la economía de los ecosistemas. Trabaja como Co-Director
del Banco Deutsche en Mumbai, India. Él ha calculado el valor económico de la
naturaleza y su deterioro, después de una investigación de tres años llevada a
cabo por cientos de expertos. Según su opinión, si se redujera la deforestación
en un 50% durante unos treinta años, disminuiría el costo del calentamiento
global porque la erosión de los bosques, áreas costeras, etc., lleva a enormes
pérdidas todos los años. ‘Un árbol es
invalorable, y lo que obtenemos de los árboles no tiene precio.’
Existe un
número de personas que disfrutan de Adyar, al que vienen a caminar debido a su
belleza, calma y por la preservación del medioambiente natural. No sólo se
protegen a los árboles, sino a muchas variedades de plantas y otras formas de
vida más pequeñas de otros reinos que también se cuidan en este predio. Todas
las ciudades necesitan un espacio donde se respeten y valoren las áreas verdes.
La importancia de preservar la atmósfera creada por habitantes de los
diferentes reinos nunca se puede elogiar en exceso.
Al considerar
este tema, la contaminación de las fuentes de agua es de suma importancia,
porque si no hay agua pura disponible, muchas plantas y árboles no pueden
sobrevivir. Necesitan muy poco, pero el agua es una de las pocas cosas que
necesitan. Los árboles son ‘ciudadanos modelo, decorativos, calmos, económicos,
serenos y valientes’. Sin suficiente cantidad de agua, los espacios verdes no
se pueden preservar. Permitirle a los árboles crecer implica asegurarse que
tengan agua disponible para ellos y también para los arbustos y
plantas pequeñas de todo tipo que crecen a su alrededor.
♥ ♥ ♥ ♥ ♥
Agradecemos este envío del Sr. César Lillo Arellano
Fraternalmente, Edgardo Ceol
*
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¿Cómo surge el egocentrismo?
por
RADHA BURNIER
¿Cómo surge el egocentrismo?
La tan usada palabra ‘mío’ hace referencia a un centro ficticio hacia el cualla mente atrae todo tipo de experiencia (Experiencia que desde la infancia hasta el presente la sociedad en la que vivimos nos los graba en el éter reflector, del cuero físico vital o etérico, como un condicionamiento social [Familiar, cultural, racial, educacional, religioso, político, militarista, económico, geográfico, comunicacional, etc.] Por tanto; en algunas sociedades, si desde niño no aprendemos a decir ‘mío’, inmediatamente suponen que tenemos un problema de identificación, identidad o pertenencia, o que padecemos de una enfermedad psicológica [Mental y emocional o astral]). En realidad no existe (Claro que no existe, porque a nivel del plano o mundo Átmico o del Espíritu Divino, todos provenimos de Dios. Y a partir del mundo de Dios; en lo más alto del 7mo plano cósmico, todo deviene y forma parte del UNO o del SER SUPREMO.). En sánscritohay una palabra ahamkâra: aham significa ‘yo’, y kâra ‘hacer’. Por lo tantoahamkâra es la parte de la mente que ‘construye el yo’. El ‘yo’ está siendocreado constantemente por el proceso de etiquetar (Etiquetas; que por nuestro personal karma, se nos enseña a formar desde la infancia a través de los condicionamientos sociales). Hay una experiencia, y si la mente nodijera consciente o inconsciente “es mi experiencia”, la experienciadesaparecería (Y si la experiencia desaparece ¿no desaparecería con ella la consciencia [La quintaesencia del conocimiento útil, bueno y verdadero extraído por el Alma o el Espíritu Humano], de dicha experiencia?. Ahora bien, si encaramos una experiencia y adquirimos consciencia de ella; y a la vez divulgamos la consciencia de dicha experiencia a otros, para que aprendan por el amor en vez del dolor, con ello no se está considerando ni la experiencia ni la conciencia como algo propio o ‘mío’. Más bien, se está haciendo todo lo contrario, porque no sólo se comunica la experiencia, sino que también se está compartiendo la consciencia de la experiencia, para beneficiar a los demás. Como ejemplo, podemos poner el caso de haber vivido una experiencia con alguien cercano que padece de una obsesión desde vidas anteriores. Obsesión; que la presente encarnación, sigue actuando y proporcionando las condiciones sociales para continuar funcionando. Y si nos atrevemos a divulgar el caso de la obsesión con su respectiva consciencia; tal experiencia que en principio fue propia o ‘mía’ porque se guardó con su consciencia, pero luego de publicarla, deja de ser de uno o individual para ir a formar parte de todos. Por tanto, cuando se tiene una experiencia; y de ella no hemos adquirido ninguna consciencia al respecto, podemos decir que dicha experiencia es propia o ‘mía’. Debido a que no tenemos nada que enseñar o compartir con los demás. Pero si de dicha experiencia extraemos consciencia de ella; y divulgamos toda la información al respecto a los demás, no se podrá decir que tal experiencia es personal o ‘mía’, ya que se está compartiendo con el prójimo la experiencia y la consciencia extraída de ella. Además, de cumplir con las condiciones de epigénesis.).
Debido a que existe la memoria (Del polo negativo del éter reflector, en el cuerpo físico vital o etérico), se repite; y debido a que tuvo ciertasexperiencias crea más categorías (Vicio o hábito). Experimentó el placer,por lo tanto dice “Yo soy el que disfruta”. Ha organizado ciertas cosas, porlo tanto dice “Yo soy el que organiza”. Así habitualmente se apropia devarias cosas y las etiqueta creando entonces el ‘Yo’ (Debido a que al vicio o hábito lo estamos alimentando con las energías del Espíritu [Espíritu Divino o Átmico, Espíritu de Vida o Búdico y Espíritu Humano o el Alma]; y colateralmente desnutriendo, nuestros cuerpos [Mental concreto, emocional o astral y físico {Vital o etérico y químico o denso}] y el ambiente personal. Por eso es que los hábitos o vicios; a la larga, generan problemas y enfermedades. Dado a que si por años se trabaja con mucho sacrificio para adquirir una casa; por ejemplo, al final diremos es ‘mi casa’. Debido a que por años se empleo todas las fuerzas del Espíritu y del cuerpo, para adquirir y disfrutar de una casa propia. Esfuerzo que de seguro menoscabó significativamente la salud, que nos permite tener vida para espiritualizar el cuerpo y evolucionar. Consecuentemente, debido a los condicionamientos sociales, casi siempre nos esforzarnos para estudiar y ser profesionales, para sacrificar prácticamente toda una vida en adquirir bienes materiales como una casa, carro, pensión y estabilidad económica; en vez, de obtener bienes del Espíritu. Y al final; en los albores de la partida de la presente encarnación, algunos [No todos] adquirimos consciencia, de que todo el esfuerzo y sacrificio que hicimos para tener bienes materiales, de nada sirvió. Porque en la muerte física; lo único que verdaderamente nos podemos llevar consigo, son los bienes del Espíritu.).
El silencio no se puede lograr por medio de otra forma de ambición. Nopueden decir, “Quiero que mi mente esté en silencio. Voy a terminar con lasfluctuaciones de mi mente”, esa sería una forma más de logro. Siempre queexista el deseo de logro o adquisición, existe esta entidad llamada el ‘yo’,la ficción psicológica que quiere lograr (Pero gracias a ese deseo de logro; posiblemente muchos Maestros lo usaron para luego superarlo y dejarlo atrás, en pro de su realización. Es como la oscuridad de nuestra ignorancia; la cual, gracias a ella, podemos ver la luz de la sabiduría.). Pormedio de un largo proceso hemos creado la noción de que existe estaentidad que debe llegar a algún lado, y continuamos apoyando esa idea.Es difícil imaginar una vida en la que ese ‘yo’ no está llegando a algún lugaro adquiriendo algo (Ahora; en la condición en la que muchos estamos, quizás no podemos hacer mucho con nuestro ‘yo’ o con nuestra ‘personalidad’ Sólo nos resta continuar conociéndonos más a sí mismos; pero en el ínterin, lo único que si podemos hacer es compartir con nuestros hermanos del camino las experiencias con sus respectivas consciencia, para que todos tengamos la oportunidad de aprender vía el amor en lugar del dolor).
Entonces no podemos lograr el silencio diciendo “yo quiero estar ensilencio”, por la simple razón de que el ‘yo’ no tiene la capacidad delsilencio. Es la única fuente de todo ruido, perturbación y problemas.Pensamos que los problemas llegan desde afuera, pero aunque puede quehaya dificultades afuera de nosotros, el problema yace en el interior. Ladificultad puede ser que el cuerpo tiene alguna enfermedad. Si estáenfermo, lo tratas. Pero la dificultad puede transformarse en un problema.“Yo estoy enfermo. He tenido una vida buena, entonces, ¿por qué debosufrir? Cuando estoy enfermo las personas no me dan el tipo de atenciónque necesito.” Podemos crear innumerables problemas a partir de esaenfermedad. Pero deberíamos ver que no es una dificultad sino un hecho,un hecho difícil tal vez, pero que se puede manejar, eso es todo (Con el debido respeto del autora; la Maestra Radha Burnier, si bien es cierto que el ‘yo’ o la personalidad no puede silenciar la mente, también es cierto que si aprendemos a enfocar la atención de mente en nuestra luz interior del Espíritu, extenderíamos un puente para que las vibraciones del Espíritu se manifieste con mayor fuerza por entre todos nuestro cuerpos, con la finalidad de: 1.- Aprender; con el tiempo, oír la Voz del Silencio. 2.- Actuar [Pensar, sentir, hablar, hacer u omitir] con mayor consciencia. 3. Manifestar verdadero amor.).
Es el yo quien crea los problemas. Y el yo nunca puede producir silencioporque está constantemente creando perturbaciones. ¡La perturbación esel yo! Los celos son parte del yo, también lo es el apego, y la intolerancia.El yo está construido de todas estas cosas. Desde ese punto de vista, unafrase como ‘la realización del yo’ es engañosa, si existe la realización de laVerdad no puede estar el yo en ella. De modo que donde hay logro oadquisición, allí está el yo, ya sea que estemos conscientes o no. En cuyocaso la mente no está vacía, está llena de yo (Porque la mente; del cuerpo mental concreto, amén de forma parte de la personalidad o de nuestros cuerpos, está sujeta o depende de los condicionamientos sociales).
La iluminación procede del interior (Del Espíritu)
Uno de los Mahatmas nos recuerda que la iluminación debe venir delinterior. El medio hacia la iluminación no es sólo la meditación, él habla dela pureza en pensamiento, palabra y acto. Debe haber pureza, control delas pasiones animales, y carencia de egoísmo en la intención. Sin éstos, lameditación no es seria, se vuelve lo que Krishnamurti llamó una actividadde aislamiento (I la iluminación; que sólo aporta el Espíritu, sólo llega cuando aprendemos enfocar la atención de mente en la luz interior del Espíritu, para que las vibraciones del Espíritu se manifieste con fuerza por entre todos nuestro cuerpos, con el objetivo de: 1.- Aprender; con el tiempo, oír la Voz del Silencio. 2.- Actuar [Pensar, sentir, hablar, hacer u omitir] con mayor consciencia o sabiduría. 3. Manifestar verdadero amor.).
Cuando hablamos de la mente, ¿incluye lo consciente y lo inconsciente?¿Cuál es la diferencia entre los dos?
La mente es por supuesto lo consciente y también lo inconsciente osubconsciente. Existen varias cosas en la mente que no se notan endeterminado momento. Eso no significa que no pertenezcan a la mente. Enla mente subconsciente puede haber avaricia, por ejemplo, pero puedeestar latente porque la oportunidad para manifestarse no se da en esemomento. Cuando se manifiesta se vuelve parte de la mente consciente.De igual modo, dentro de la mente hay muchas tendencias que llevamos deencarnación en encarnación y llegan a la mente consciente según lascircunstancias y la oportunidad. Lo mismo ocurre con la memoria. Existenmuchos recuerdos de los que la persona no es consciente. Algunas vecesse pueden recordar con bastante facilidad, y otras veces sólo en ocasionesespeciales (Interesante punto de vista, pero de acuerdo a otros Maestros, la mente subconsciente es aquella que graba todos los acontecimientos que acontecen en nuestro entorno; en los cuales, no tenemos fijada la atención de la mente consciente. Por ejemplo, redactando o leyendo los presentes comentarios observamos que la atención de la mente consciente la tenemos enfocada en el escrito; pero la mente subconsciente también está grabando los acontecimientos que ahora mismo acontecen en nuestro entorno, como e ruido del carro, el grito del niño, el cantar del pájaro, el sonido del acondicionador de ambiente, etc. Y sólo cuando aprendemos a fijar la atención de la mente consciente en nuestra luz interior o del Espíritu, es cuando lograremos captar a la vez todo: Lo consciente [Con nuestros cuerpos o la personalidad], y lo subconsciente [Con el Espíritu]).
Ciertas preguntas fundamentales siempre se tendrán que examinar concuidado. La que nos interesa principalmente en este momento es: “¿Cuáles la naturaleza del yo?” Hemos visto que esto requiere mucha reflexión ypodemos lograrlo sólo por el uso sostenido de energía.
Hemos llegado a ciertas conclusiones. El yo parece ser yo mismo, el ‘yo’.Este ‘yo’ está formado de impresiones creadas principalmente por elcuerpo porque tenemos cierta imagen de nosotros que está parcialmenteconectada con la persona física. Llegamos a comprender que esta personafísica tiene poco que ver con el yo real. La confusión entre esto y el Yo es lacausa de muchos problemas y éstos se complican más con laidentificación con las emociones y los pensamientos (Pensamientos y emociones; que por nuestro personal karma, están limitados por los condicionamientos con los que fuimos criados y con los que actualmente operamos en la presente sociedad, para subsistir. Considerando que todos los condicionamientos sociales; como por ejemplo el amor a la patria, tienen su componente mental y emocional o astral.).
Nada de esto se puede comprender en profundidad por medio de unproceso de simple razonamiento, sino solamente por medio de lo que seha llamado ‘clara visión’ (Que sólo aporta el Espíritu, cuando enfocamos o enchufamos la atención de la mente a Él.). Pero debido a que la ilusión delyo como auto-existente, como que tiene una identidad individual separada,se ha aceptado como una realidad durante muchos años, ciertamentedurante muchas encarnaciones, ha asumido la apariencia de realidad.Estamos condicionados por todo a nuestro alrededor y tomamos suexistencia como natural. Cuando niños se nos enseñó a fomentar nuestrosintereses, a pensar en todas las cosas en relación con esto. Todo esto nopuede evitar que ejerza su influencia. Entonces es fácil aceptar la creenciade la existencia del yo, y debemos observar muy cuidadosa e internamentepara descubrir la verdad, para descubrir si después de todo es sólo unaimposición, una ficción creada por el pensamiento (O por los condicionamientos sociales; dado a que si hubiéramos tenido la fortuna de nacer dentro de un grupo familiar que maneje o conozca éstas enseñanzas, de hecho no estuviéramos condicionados socialmente como ahora. Consecuentemente; desde la infancia, hubiéramos aprendido; que el ‘yo’ o la personalidad no existe, porque todos formamos parte del TODO. Y que la personalidad o el ‘yo’ sólo emerge, cuando nos separamos o enfocamos la atención de la mente en lo material. Es igual a la ecuación siguiente: Espíritu + Materia = Consciencia, pero Espíritu <> Materia = Yo o Personalidad).
Sería simplemente fácil decir: “Sí, el yo no es real”, o “El sentido deseparación es una ilusión”. Pero eso sería sólo proferir palabras. Sirealmente viéramos el hecho, cambiaría nuestra vida.
La meditación (Y la auto-observación de sí mismos sin calificativos) es eltrabajo que hay que hacer para ver. No es sólo una actividad cerebral, esexplorar profundamente para descubrir la verdad con respecto a lanaturaleza de ese yo que nos ha estado manejando por innumerablesencarnaciones.
Auto-existencia
La idea de la auto-existencia (existencia-en-sí-misma) está asociada conla existencia de todo lo que conocemos. Debido a que vemos todoseparado físicamente, creemos que todo existe en sí mismo y por símismo. Y cuando pensamos en términos de conexión, es superficial. Demodo que las relaciones se pueden establecer y romper porque la relación,según nuestras ideas, es en sí algo que yace sólo en la superficie de lavida, cuyo logro o ruptura depende sólo de nuestra voluntad. Pero nosotroscuestionamos la afirmación de que ésta sea la realidad, es decir que sonobjetos separados, desconectados unos de otros. Nos preguntamos si enrealidad la existencia, que es el yo de todas las cosas, tiene una naturalezatotalmente diferente.
Desde un punto de vista intelectual se pueden dar muchas respuestas, ypodemos citar autoridades en el tema. Pero todo esto no tiene nada quever con comprender la Verdad con la que estamos particularmenteinteresados. “Por sus frutos los conoceréis.” La inutilidad de los ejerciciospuramente mentales e intelectuales se pueden ver por sus frutos, o por laausencia de ellos, porque habiéndolos practicado al máximo nosencontramos en exactamente la misma situación, asediados por lasmismas perturbaciones, por los mismos problemas en las relaciones, por lamisma falta de comprensión. Descubrimos que el intelecto no tienerespuestas (Porque el intelecto; que es la mente, cuando está desconectado del Espíritu, no puede generar ninguna respuesta. A menos, que sean las respuestas que hemos grabado en el éter reflector, del cuerpo físico vital o etérico como condicionamientos sociales.).
Pero luego descubrimos que existe un tipo diferente de conocimiento quellega por una comprensión más profunda y vemos que da su fruto. Uncambio profundo puede ahora ocurrir porque miramos el problema desdeun punto de vista diferente.
Dirigir la energía de la mente a la investigación del yo o a examinar lanaturaleza de la existencia, significa también explorar su significado ypropósito. A menos que haya claridad sobre la cuestión de la auto-existencia, la existencia independiente no relacionada entre sí de cadacosa, no seremos capaces de comprender esto.
Si la mente no ve la naturaleza del Yo, si es incapaz de aprovechar larelación que existe en lo profundo a un nivel sutil, no podrá ver la vida entodo su significado y belleza.
Podemos ver la relación entre las cosas separadas, entre objetos quepermanecen separados pero que todavía existen en algún tipo de relación.También puede haber una percepción en la que la relación no essimplemente la unión de cosas separadas. La unidad es mucho más queesto. Pero sólo puede ser descubierto por una mente que es capaz deahondar más (Y una mente puede ahondar más, cuando se encuentra iluminada con la luz del Espíritu. Podemos ver más en un cuarto oscuro, si prendemos la luz. De igual manera, la mente podrá ver la naturaleza del ‘yo’ o de la personalidad, cuando se alumbra con la luz del Espíritu. Pues cuando aprendemos a enfocar la atención de la mente en el Espíritu, quien verdaderamente está viendo la personalidad o el ‘yo’ no es la mente; quien forma parte del ‘yo’ o de la personalidad, sino el Espíritu. Quien necesariamente requiere utilizar la personalidad o el ‘yo’, para manifestarse y adquirir consciencia).
Los árboles, una necesidad
Un artículo provechoso relacionado con los árboles se publicórecientemente en el Guardian Weekly. Se refiere a los árboles queactualmente están pasando un mal momento, que constantemente estánbajo amenaza. En buena medida los árboles son el hogar de labiodiversidad del mundo, pero están siendo destruidos sin misericordia.Han cortado la mitad de los árboles en bosques o selvas, y cada año lasáreas forestadas se ven diezmadas. Esto reduce la cantidad de aire puroque nosotros, los humanos, respiramos. Además de esto, está la bellezade los árboles.
Un gran árbol como el Banyano puede ser una maravillosa ayuda pormuchos motivos. Pero especies más pequeñas también son invalorables.No podemos sobrevivir sin ellas, y se requiere una comprensión profundapara percibir este hecho. Muchos árboles viven mucho tiempo y otrosproducen retoños, de modo que cuando hay un árbol, puede haber muchosmás. La atmósfera misma que respiramos se transforma cuando existe unárbol porque absorben el contenido de carbono y otros contaminantes.Cuánto más viejos son, más controlan los contaminantes. Además, dondeexisten árboles, la temperatura es menor si el clima es cálido.
Desafortunadamente, un problema mayor que la cantidad de árboles quese han cortado y los bosques y selvas que han desaparecido, es la gravecondición del clima. La Organización de las Naciones Unidas que colaboracon entidades que ayudan a reducir emisiones de carbono, dice losiguiente: plantar árboles puede compensar en gran medida las emisionesen la primera mitad del siglo. Por lo tanto, existe una necesidad urgente desalvar los árboles incluso en las ciudades. El economista indo, P. Sukhdev,es también un líder en el estudio de la biodiversidad, y de la economía delos ecosistemas. Trabaja como Co-Director del Banco Deutsche enMumbai, India. Él ha calculado el valor económico de la naturaleza y sudeterioro, después de una investigación de tres años llevada a cabo porcientos de expertos. Según su opinión, si se redujera la deforestación en un50% durante unos treinta años, disminuiría el costo del calentamiento globalporque la erosión de los bosques, áreas costeras, etc., lleva a enormespérdidas todos los años. ‘Un árbol es invalorable, y lo que obtenemosde los árboles no tiene precio.’
Existe un número de personas que disfrutan de Adyar, al que vienen acaminar debido a su belleza, calma y por la preservación delmedioambiente natural. No sólo se protegen a los árboles, sino a muchasvariedades de plantas y otras formas de vida más pequeñas de otrosreinos que también se cuidan en este predio. Todas las ciudades necesitanun espacio donde se respeten y valoren las áreas verdes. La importanciade preservar la atmósfera creada por habitantes de los diferentes reinosnunca se puede elogiar en exceso.
Al considerar este tema, la contaminación de las fuentes de agua es desuma importancia, porque si no hay agua pura disponible, muchas plantas yárboles no pueden sobrevivir. Necesitan muy poco, pero el agua es una delas pocas cosas que necesitan. Los árboles son ‘ciudadanos modelo,decorativos, calmos, económicos, serenos y valientes’. Sin suficientecantidad de agua, los espacios verdes no se pueden preservar. Permitirlea los árboles crecer implica asegurarse que tengan agua disponible paraellos y también para los arbustos y plantas pequeñas de todo tipo quecrecen a su alrededor.
(Jacques-Yves Cousteau demostró, que si bien es cierto que los árboles contribuyen a mantener limpia la atmosfera de la Tierra, el principal elemento que coadyuva a la oxigenación del ambiente son los océanos, o las burbujas de aire que emergen a la superficie de las aguas; y al explotar, liberan oxígeno hacia la atmosfera. Y como la Tierra está cubierta en un 70% [+ ó -] de agua, entre menos contaminemos los océanos, y talemos los bosques, más evitaremos el recalentamiento global del planeta. Por lo que lo ideal es continuar haciendo los esfuerzos de: 1.- Sembrar consciencia en cuanto a la contaminación del ambiente y personal. Pues si se contamina el ambiente; simultáneamente se coadyuva a generar más enfermedades, en las personas. 2.- Buscar más medios alternativos; y económicamente rentables, para dejar de comercializar y usar la madera y los sub-productos de los árboles como el papel. 3.- Reforestar las zonas baldías de la Tierra. 4.- Incrementar la tecnología de potabilizar las aguas de los mares. 5.- Ampliar la utilización de fertilizantes biodegradables, para reducir y evitar la contaminación química de los suelos cultivables y de las aguas. 6.- Desarrollar procedimientos tecnológicos que conviertan económicamente rentable; la reutilización y proceso de los desechos sólidos y líquidos que se tiran a las aguas o en los vertederos de basura. 7.- Comenzar a utilizar el hidrógeno; elemento usado en todo el Sistema Solar, como energía sustitutiva del petróleo.)
Cordiales saludos: Jorge
gracias por los comentarios
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